En torno a la plaza de Jemaa el Fna se encuentran los zocos más imponentes de la ciudad así como algunos edificios monumentales interesantes. Esta zona no es, en sentido estricto, el centro geográfico de la medina, pero sí un punto estratégico desde el que se puede iniciar cualquier visita. Todas las calles importantes de la ciudad vieja (si alguna de las vías puede llamarse así), desembocan o se acercan a este espacio abierto. Es, también, un punto de referencia para todos aquellos que tengan dificultades para orientarse. A la mínima sensación de pérdida, no hay más que decir Jemaa el Fna para que algún lugareño indique el camino más cercano. Esta zona de la ciudad es la más transitada y aunque la medina no es peligrosa alrededor de la gran plaza es posible caminar hasta altas horas de la noche sin problemas.