Una de las terrazas de los muchos restaurantes de Bruselas. En la cocina de los belgas, amantes de la buena mesa, no faltan grandes dosis de imaginación, y constantemente se busca ese toque que marca la diferencia también en lo referente a los platos típicos tradicionales que pertenecen a la cultura de la ciudad, como las patatas fritas con mejillones, las coles o la endibia, variedad de escarola famosa en todo el mundo. Son casi un millar los restaurantes, para todos los gustos y para todos los bolsillos, que hay repartidos por los barrios de Bruselas y por lo menos 200 están recomendados por la guía Gourmet; todos proponen recetas que, respetando la tradición, invitan al descubrimiento y a la creatividad. Entre los más innovadores destaca Le Pain Quotidien, a mitad de camino entre la panadería tradicional y el local de nueva concepción en el que se puede desayunar, almorzar y disfrutar, hasta bien entrada la tarde, hasta de un chocolate caliente. COMIENDO EN LA TERRAZA DE UN RESTAURANTE DE BRUSELAS.