Visgtas exteriores del Castillo de Angers. Un paseo por el casco antiguo, una visita al mercado de la Plaza Saint Pierre, y por supuesto, una parada obligatioria en el castillo de Angers para poder admirar los famosos tapices inspirados en la Apocalipsis de San Juan serán las últimas seducciones de un viaje de ensueño, en el que romanticismo y deporte se fusionan.