Ritmo sosegado en la Plaza central de la población de Filandia. Quindío. Filandia es otro de los pueblos predilectos por los visitantes debido a su tranquilidad y a la bonita arquitectura de la colonización antioqueña. La historia dice que don Felipe Meléndez, viejo colonizador, fundó el poblado en compañía de varios amigos y lo bautizó con la mezcla del latín fila (hija) y el inglés landia (Andes). Filandia: hija de los Andes. Se encuentra al norte del departamento por la Autopista del Café, de la que hay que desviarse a la izquierda en el km 20 para luego tomar una vía pavimentada y angosta de unos 7 km. Este último tramo se hace entre fincas y las reservas naturales de Bremen y Barbas, que  a la vez crean un entorno paisajístico muy llamativo por su verdor y fertilidad. El lugar está dispuesto en una meseta, ubicación desde donde se aprecian varias de las municipalidades limítrofes. Este destino ofrece también como encanto el carácter amable de los pobladores, muchos de ellos trabajadores de los cultivos de café, primer producto del municipio y motivo forjador de la cultura que se vive en todos sus rincones. Muchos de estos campesinos, al terminar sus jornadas, se congregan en la plaza y en los establecimientos públicos para compartir experiencias con tertulianos de adentro y de afuera.