Jardín estilo japonés Lili’uokalani Park en Hilo. Big Island.  Los Orígenes del Hula El hula nació como una manera de adorar a los Dioses. En la antigüedad, el hula se danzaba en una plataforma que a su vez tenía un altar con la figura de la diosa Pele. Los trajes tradicionales incluían leis, una pau (pollera) y brazaletes hechos con huesos de ballena o dientes de perro en los tobillos. Los trajes de hoy en día son más modestos y la escuela de Halau Hula requiere polleras largas y un top para las mujeres, mientras que los hombres pueden elegir entre usar pantalones o un malo (una tela enrollada por debajo y alrededor de la entrepierna). Hombres y mujeres participaban en los hulas, tal como lo hacen hoy en día; pero los cantores o cantantes, fueron y son hombres. El canto, o mele, cuenta la historia, mientras el hula o la danza, enfatiza la historia con movimientos de manos y pies que forman parte de una coreografía. El hula que danzan los hombres es más vigoroso que las danzas más lánguidas que son interpretadas por las mujeres. El hula es acompañado por instrumentos. La música ayuda a mantener el ritmo tanto para los músicos como para los bailarines. Tradicionalmente, las calabazas, las cañas de bambú y los palos se utilizaban para crear música. Un tambor de calabaza llamado ipu, era acompañado por un doble tambor de calabaza llamado ipu heke. Las tobilleras hechas con dientes de perro eran consideradas instrumentos de música también. En la era moderna, se utiliza el ukelele para mantener el ritmo, incluso guitarras y bajos pueden ser usados para sumar profundidad al sonido y realzar el ritmo. La Prohibición del Hula y su Renacimiento Con la llegada de los misioneros, a principios del 1800, el rol del hula comenzó a cambiar. Los misioneros protestantes denunciaron al hula como un baile pagano y pronto fue prohibido. Los misioneros condenaban los movimientos, la vestimenta ligera y la adoración a múltiples dioses. La Realeza hawaiana fue incitada a denunciar el hula, y lo hicieron poco después. Pero el hula no murió. Era practicado en secreto y transmitido entre familias. Con la venida del Rey David Kalakaua, el hula revivió y lentamente comenzó a sufrir cambios. El Rey Kalakaua era muy partidario de las artesanías tradicionales hawaianas. Pronto, el hula que se practicaba pasó a llamarse Hula Kui, “viejo y nuevo”, ya que combinaba el estilo tradicional con nuevas interpretaciones de las viejas danzas. Con el comienzo del turismo como negocio en Hawaii a comienzos del siglo XX, el hula pasó por otro cambio. El hula comenzó a representarse en películas con melodías suaves y muy distintas a las del verdadero hula. Nuevas canciones fueron escritas para estos nuevos estilos de hula así como fueron diseñados nuevos y bellos atuendos con la idea de atraer al turismo. Fueron muy populares las polleras de celofán y las melodías románticas que fueron interpretadas especialmente para los turistas. Las escuelas donde se enseñan estas danzas o Halau Hulas, seguían enseñando el hula tradicional, que era practicado por los adultos. Los trajes tradicionales para el hula son modestos y no reflejan lo que representa la versión de Hollywood.