Vendedoras de souvenirs junto al monasterio de Debram Maryam en el Lago Tana. Las islas del lago Tana albergan monasterios del s. XIII y XIV, aun habitados por monjes y monjas (separados, por supuesto), que siguen una vida apartada y, nunca mejor dicho, monástica... sorprende la delgadez de algunos de ellos, que se mantienen con un puñado de grano al día y poco más! Fueron dundados por ermitaños del cristianismo primitivo que buscaban un lugar donde retirarse del mundo terrenal, y hasta allí siguen acercándose los peregrinos, sobre todo en fechas señaladas. Uno de los más bonitos es el Ura Kidane Mihret, también de los más frecuentados por los turistas. Un paseo de casi media hora por el bosque nos conduce a él, una construcción circular, típico ejemplo de iglesia ortodoxa etíope, hecha de argamasa de barro con techo de paja y forma cónica, guarda en su interior frescos, manuscritos, objetos eclesiásticos, coronas y vestimentas reales de varios emperadores del s. XIV.... Uno de estos monjes consintió en dejarnos hacerle fotos mientras leía uno de sus "incunables", un manuscrito del s. XIII o XIV. Sí, no son libros guardados para museo, los siguen utilizando! Cuando decidió que ya era suficiente, con un gesto leve, pero serio y lleno de autoridad, nos despidió.