Puesta de sol cerca del campamento Savute Elephant Camp de Orient Express en Botswna, en el Parque Nacional de Chobe. BREVE DESCRIPCIÓN HISTÓRICA DE BOTSWANA: Se cree que el pueblo san (bosquimanos) habitaba Botswana hace treinta mil años siendo las Colinas de Tsodilo con sus más de 3.500 pinturas rupestres la mejor prueba de ello. Les siguieron los khoi-khoi (hotentotes), de cultura ganadera, y más tarde los bantúes, que emigraron desde las regiones noroeste y este de África entre los siglos I y II de nuestra era y se establecieron junto al río Chobe. Hasta el siglo XVIII los distintos grupos bantúes, como los tsuana, agrupados en pequeñas comunidades convivieron pacíficamente en el Kalahari. Las disputas propiciaban separaciones de mutuo acuerdo. Hacia 1800, las tierras de pasto a orillas del Kalahari estaban ocupadas por pastores y la separación pacífica dejó de ser una solución factible a las disensiones. Por otra parte, los europeos habían llegado a El Cabo y se expandían hacia el Norte. Tras la unión de las tribus zulúes en Suráfrica en 1818, los colonizadores agredieron los diseminados pueblos tsuana, potenciando su vulnerabilidad. Como respuesta, se reagruparon y su sociedad se estructuró de forma compleja: una monarquía hereditaria reglamentaba cada nación tsuana y los súbditos residían en poblaciones centralizadas y poblaciones satélite. El orden y la estructura de la sociedad tsuana impresionó a los misioneros cristianos, que se introdujeron a principios del siglo XIX. No lograron evangelizar a una gran mayoría, aunque consiguieron asesorarlos, a veces erróneamente, en sus tratos con los europeos. Entretanto, los boers iniciaban la gran migración (Gran Trek, 1834-1844) hacia el Vaal, atravesando el territorio tsuana y zulú e imponiendo las leyes occidentales. Muchos indígenas trabajaron en las granjas boer, pero la rebelión y la violencia propiciaron el fracaso de esta asociación laboral. En 1877 la animadversión había crecido de tal forma que los británicos intervinieron para anexionarse el Transvaal, desencadenando la primera guerra de los Boers. Tras la convención de Pretoria de 1881 la presión boer disminuyó, pero al año siguiente regresaron a las tierras tsuana, que volvieron a reclamar la protección británica. La intervención de Gran Bretaña conllevó a los pueblos indígenas a aceptar sus condiciones. Las tierras situadas al sur del río Molopo pasaron a denominarse Colonia de la Corona Británica de Bechuanalandia, mientras que el área situada al norte se convirtió en el Protectorado Británico de Bechuanalandia (la actual Botswana). Sin contar los años en los que Gran Bretaña cedió el control a la South Africa Company de Cecil Rhodes, dominó el país hasta 1966. El nacionalismo se había desarrollado ampliamente durante los años cincuenta y sesenta. Después de la matanza de Sharpeville en 1960, se formó el Partido del Pueblo de Bechuanalandia, cuyo objetivo se centraba en la independencia. En 1965 se celebraron elecciones generales, y Seretse Khama fue elegido presidente. El 30 de septiembre de 1966, la República de Botswana obtuvo su independencia. Con el descubrimiento de minas de diamantes cerca de Orapa en 1967, Botsuana se transformó económicamente. Aunque la mayor parte de la población pertenecía a las capas más desfavorecidas, esta riqueza mineral proporcionó al país enormes reservas de divisas extranjeras y la pula (moneda de Botswana) se convirtió en una de las principales monedas africanas. Pero en 1999, el mercado internacional del diamante se desplomó y se produjo el primer déficit presupuestario de Botsuana en 16 años. En cualquier caso, en relación al resto del continente africano, sigue gozando de una gran estabilidad y riqueza. El gobierno está considerado pragmático y prooccidental, aunque existe cierta inquietud por los crecientes gastos en infraestructura militar. En la actualidad, los mayores problemas de Botswana son el paro, el SIDA, el éxodo de la población a las ciudades y una tasa de natalidad imparable, que ha empezado a reducirse en los últimos años por la difusión del VIH y el SIDA en los grupos de edad para tener hijos. El país padeció unas inundaciones devastadoras en el 2.000 que dejaron a 70.000 personas sin techo, mientras que las sequías de los últimos años han causado gran sufrimiento a la población, sobre todo en el oeste. En 2.004, el índice de infección de VIH y de SIDA de Botswana era del 37,5%, y el país asistía a un pavoroso influjo migratorio de refugiados de Zimbabwe. A pesar de esos problemas, Botswana sigue siendo una nación tranquila.