Los habitantes de la isla de Mabul, gitanos de mar, comparten su territorio con algunos hoteles destinados a los submarinistas. Posiblemente uno de los puntos de buceo más luminosos y recomendables para fotografía de ambiente. La pared vertical está coronada por una plataforma coralina rebosante de vida, con decenas de estaciones de limpieza en la que se aglomeran labios dulces, meros y peces murciélago, esperando que los pequeños lábridos realicen su tarea. Los corales son de los mejores de la isla y la parte baja de la pared, entre 30 y 40 metros, brinda la oportunidad de contemplar gorgonias de tamaños increíbles, al igual que descomunales orejas de elefante, esponjas de barril y alcionarios de vellos colores y considerable tamaño.