Cerca de la cascada, hombres y mujeres venden velas, cordones azules y blancos que representan a los loas e imágenes de la Virgen de los Milagros. Los tambores tocan ritmos sincopados, y algunas personas entran en trance, hablando en voz alta y moviéndose frenéticamente. Más allá de los estereotipos, que describen al Vudú como pura magia negra, rituales con muñecas, sacrificios de animales y muertos vivientes, ésta es básicamente una religión pacífica, en la que los ritos constituyen una experiencia mística para los iniciados. Existe también el Vudú Congo, que se distingue por el uso de maldiciones, males de ojo y "polvos maléficos". Más de 60 millones de personas practican el Vudú en todo el mundo. Los rasgos de esta religión proceden de la cultura animista de un pueblo africano, los yorubas, provenientes de Nigeria, Benín y Togo.